Un disparo en la mirada (D. Calzado/Alejandro y Rember) [aquí para la letra]

«Alejandro y Rember» son dos personajes algo misteriosos, estudiantes de medicina/compositores que trabajaron conjuntamente con David Calzado para realizar varias canciones y que más tarde proporcionarían a La Charanga Forever con un gran tema titulado «Mi Mecánica». No sabemos mucho más de ellos ni de sus andanzas, pero podemos constatar que, por lo visto y escuchado, su calidad de composición es muy buena.

Afin a una sinfonía clásica, uno de los elementos que unifica el trabajo de «Tremendo Delirio» es la constante reaparición y desarrollo de los mismos motivos musicales. Un ejemplo es la familia de frases ascendentes de teclado y bajo que introducen tres de los mejores temas. Aunque las frases son bastante parecidas, cada una empieza en anacruza, dificultándonos la tarea de ubicar el primer tiempo del compás. «Usa Condón» empieza en la segunda semicorchea del cuarto tiempo [ejemplo de audio 14], «Hagamos un Chen» en la segunda semicorchea del tercer tiempo [ejemplo de audio 15] y el tema en discusión, «Un Disparo en La Mirada» en la segunda semicorchea del segundo tiempo [ejemplo de audio 16]

La mera introducción de «Un Disparo...» es una fabulosa composición en miniatura. Luego del inicio algo desconcertante, los metales entran con una melodía más normal, pero de hecho ¡su inicio ha sido desplazado a la mitad del tiempo anterior! La primera nota de los metales, si estás prestando atención, (o ¡debería decir: «si no eres cubano»!) parece caer sobre el primer tiempo pero de hecho es anacrúcico del cuarto tiempo. Otro gran detalle, si escuchas atentamente, es el teclado que repite la línea introductoria una y otra vez, una octava más arriba. [ejemplo de audio 16]

El cuerpo breve y melódico efectúa una sutil pero poderosa transición a la onda más dura en escala menor que predomina a través del disco, utilizando el intercambio entre Sombrilla y el coro para traernos un bloque bestial. [ejemplo de audio 17] ¡Atraviesa una gama asombrosa de emociones musicales! La manera en la cual cruza las barreras entre el rap y la melodía en «pa' que? pa' que Mayito?» es algo realmente muy creativo y emocionante.

nota: Este es el pasaje que describe Allan Johnston en su artículo especial del estilo de Pedro Pablo en el bajo.

El primer coro es mitad melodía, mitad rap, y existe también un interés estructural -- deja pequeños huecos entre el coro para que Sombrilla los llene y añada un «no sé de donde son» extra antes de la primera (y sólo la primera) de las tres guías. ¡Estás guías emanan tal inspiración que debemos hacer hincapié en cada una de ellas!

La primera línea es una ocurrida variación de lo que hubiese sido el segundo verso del coro, pero escucha la emotiva entrega con inflexiones del blues cuando canta «se mantienen».

coro: no sé de donde son
Sombrilla: de donde salen de donde vienen
esas mujeres como valen y como saben
por eso se mantienen...di tú! [ejemplo de audio 18]

Después de algunos intercambios más con el coro, la segunda guía de Sombrilla es un gancho provechosísimo que levanta la energía rítmica del tema.

Sombrilla: yo tengo mi mirada calibre veintidós
calibre cuatro cinco hasta fuerza de granada
pero a pesar de todo eso
lo juro!
a veces no resuelvo nada...nada [ejemplo de audio 19]

En los espacios siguientes, Sombrilla hace eco de los versos propios del coro y le suma más ideas del blues antes de llegar a su tercera guía, la cual pega justo en el famoso diablo en música con la palabra «deseperes», creando un momento cumbre junto a «yo te lo voy a cantar».

Sombrilla: yo tuve que fabricar
una mirada tan especial
pero no te desesperes
que como el coro que viene
yo te lo voy a contar...sí! [ejemplo de audio 20]

Los dos coros siguientes son rapeados. Está de moda odiar al rap en muchos círculos, pero es difícil imaginar siquiera a uno de los críticos más severos del rap sin conmoverse con este disco. Cada segmento de rap es preparado por, se sigue de y está envuelto en la música más exquisita, permitiendo al receptor de sentir todo el poder rítmico de la palabra hablada sin sacrificar la alegría de la música en el trayecto. Escucha la frase: «mírala como se mueve». (al final del ejemplo 20) En realidad, es un poco como escuchar los discursos de Martin Luther King o los soliloquios de Shakespeare. Las cualidades e inflexiones rítmicas del habla tienen un alcance expresivo sorprendente. La idea es incorporarlas sin diluir la magia de la música. Es muy fácil exagerar y estropear el resultado, y la timba menos lograda, inspirada precisamente de este disco, ha sido a menudo culpable de dicho exceso.

Cubanos siempre han estado fascinados con la música rap de los EE.UU. Desde los expermientos ingenuos de NG La Banda a las sofisticadas y pulidas representaciones de grupos como Orishas y Obsesión, se ha intentado, con cierto éxito, de fusionar la fraseología e inflexiones rítmicas del rap estadounidense con el español y los tópicos de la isla. Pero el «rap» de «Tremendo Delirio» es un estilo musical totalmente distinto que le debe muy poco a esa estirpe rapera del norte, salvo, claro, la idea básica de reemplazar el canto por diálogo rítmico. Es extremadamente cubano de una forma muy natural y modesta. Escucha la guía rapeada de Sombrilla que precede el tercer coro:

Sombrilla: fue tanto lo de esa niña caballero
que hasta lentes tuve que ponerme
pero al final me la lleve y tú sabes lo que le canté
pregúntale a Calzado ... así [ejemplo de audio 21]

o más tarde:

Sombrilla: por que te di por que te di
en el mismo centro de tu corazón [ejemplo de audio 22]

Es imposible imaginar a un rapero estadounidense haciendo uso de este tipo de fraseología. La Charanga Habanera también mantiene la estructura coro/guía, deja el tumbao como tal, para balancear la falta de melodía en las voces, y en lugar de utilizar pistas de batería secuenciadas y repetitivas, la percusión es real, cambiante y ocurrida, utilizando ideas de gran agudeza como aquél «tiro de bala» que produce la caja en los ejemplos anteriores.

Nota: También existe un «remix» de esta canción, colocado al final del disco que de hecho sí utiliza una pista de batería y la obligada célula de bombo estilo disco/dance. Aparentemente fue juntado a prisa por Calzado y los cantantes en España como patraña de marketing. El tema tiene, sin embargo, sus virtudes -- la introducción cuenta con una parte agradable en el piano. [ejemplo de audio 23] La banda solía utilizar esta versión como fondo durante la coreografía inaugural de su presentación en vivo. Aquí hemos decidido respetar el flujo natural del trabajo terminando nuestro análisis con el onceavo tema, considerando esta versión «número extra» similar a los que hoy se incluyen en muchas re-ediciones de álbumes clásicos.