parte II - agosto, 2007

Creemos que la primera grabación con el nuevo y excitante estilo de tocar de la Ritmo Oriental fue  un EP con cuatro canciones, Sabroseao con la Ritmo, Qué historia, Quiéreme mucho, y Chica te quiero ver. ¿Recuerda haberlo grabado? ¿Sabroseao fue un gran hit en la radio? ¿Fue el primer hit con el nuevo estilo?

¿Puede confirmar que estas cuatro canciones vinieron antes que Mi socio Manolo?

Sí.

¿Cuáles fueron los otros discos de 45 y EPs grabados a principios de creado el nuevo estilo? ¿Quién dice?, ¿Y se baila así? ¿Cuáles fueron las canciones más populares del grupo en sus inicios?

Mi socio Manolo. Pero la que ya consolida la Ritmo Oriental así es Yo Bailo de Todo, Se Baila Así, que la gente le dice Juana no me quiere porque yo no sé bailar, La Chica Mamey, Quién Dice?, Avísale a Teté, La Panetela, ehhhh… bueno y unos cuantos… El Matrimonio Feliz.

Y todas esas canciones se escuchaban bastante en la radio.

Nosotros teníamos el uno aquí en la radio. Se oían mucho. Aquí había otras agrupaciones como La Monumental, Los Latinos, que también se oían pero La Ritmo Oriental también se oía, Los Van Van, pero La Ritmo Oriental era la que estaba golpeando en esos momento.

Usted nos comentó que Mi socio Manolo nunca fue sacado a la venta en formato de 45, pero fue un gran hit en la radio, ¿verdad? ¿Esto sucedió sólo después de que saliera el LP, o llevaron la grabación a la radio antes de su lanzamiento?

Mira, aquí se hacía todos los años antes de los carnavales, antes de las fiestas de julio, los carnavales en toda la Isla… en el ICRT todas las agrupaciones hacían un número que ese era el número que iban a hacer en los carnavales, entonces el ICRT se encargaba de enviarlo a todas las emisoras del país. Entonces bueno, nosotros grabamos Mi socio Manolo, la otra gente grabó otro y así.

Entonces eso fue grabado específicamente para el carnaval, para el verano.

Si, para el verano, en Radio Progreso y después sí se hizo el disco.

Y ustedes siempre tocaron en los carnavales de La Habana?

En todos los carnavales del país tocó La Ritmo Oriental. Camaguey, Santiago, Bayamo, Palma Soriano, Guantánamo…

Y cómo viajaban por tren o guagua?

En aquel entonces viajábamos por avión. Siempre viajamos por avión, porque las distancias eran largas. Pero después que se hizo las Ocho Vías, viajábamos hasta Santa Clara por carretera, Santa Clara y Cienfuegos. Y las demás provincias, Camaguey, Ciego de Ávila, Holguín, las viajábamos por avión, igual que la Isla de la Juventud, también la viajábamos por avión. Y algunas veces usábamos el cometa por mar, pero bueno, siempre viajábamos en avión.

¿Quién es “Rufo”? Nos dijo que el escribió Quién dice, pero la lista de la EGREM dice que fue Juan Crespo quien escribió la canción.

Rufo Ballán, un compositor santiaguero. La gente llama a Quien dice? La Gorda.

Si, del cual la Charanga Habanera hizo una versión hace poco.

Si, la gorda, si.

Nos dijo que Qué se sepa bien mi amor no es una de sus canciones, pero según la EGREM sí lo es.

Si, porque eso tiene otro título me parece. Que se sepa bien mi amor, eso tiene otro título que yo no recuerdo porque ya hace muchos años… Eso es de Juan Crespo Maza… Dónde estás mi amor? Se llama. Y es de Juan Crespo maza. Ese es uno de los títulos que antes de nosotros tener la popularidad que tuvimos posterior se oía mucho aquí en la radio, antes de Mi socio Manolo.

¿Puede describir aquellas primeras sesiones de grabación en la EGREM cuando Mi socio Manolo y otras canciones fueron grabadas? ¿Tuvieron que repetir mucho las grabaciones? ¿Hicieron alguna sobremezcla?

No, no, no. Porque mira, te decía que ya la orquesta nuestra gozaba de un nivel técnico bastante elevado y entonces también irrumpió en el mundo de las grabaciones y eso lo que se llamó pistas, grabarlo por pistas. Y entonces el ritmo se grababa, y después se ponían los violines, y después se ponía que se yo y después la voz y después venía la mezcla. Como se hace hoy actualmente, lo que pasa es que ya hoy se cuenta con una tecnología más avanzada, pero en aquel momento yo creo que había cuatro pistas. Así es, cuatro pistas tenía la EGREM. Empezamos a grabar con cuatro pistas y ya las cosas salían más fluidas porque ya cuando tú estás grabando por pistas tú te puedes equivocar. Y entonces después cuando lo hace todo el mundo lo puedes poner todo arriba. No como antes que a la vez que tú te equivocabas tenía que parar todo el mundo y empezar todo el mundo otra vez. Esa es la ventaja que tiene la pista. Aunque también… ya después uno se adaptó, pero al principio se sentía muy seco, porque el swing de eso, lo bueno de eso es grabar todo el mundo junto. Que es cuando le da el swing, pero ya cuando se graba por separado así se pierde algo del swing. Pero después nos fuimos adaptando, nos fuimos adaptando y fue saliendo la cosa bien. Es un proceso de adaptación a la nueva tecnología.

Y ustedes hicieron alguna sobremezcla cuando hicieron las grabaciones?

Si, cuando tú haces la grabación, después que tú grabas por todas esas partes diferentes así, después tú tienes que hacer el proceso que se llama mezcla, que es unir todos esos instrumentos para darle el acabado al disco, que es lo más importante que tiene el disco, la mezcla esa, que salga bien.

Después del álbum en 1974, con Mi socio Manolo, vino el álbum en 1975 con Yo bailo de todo, La chica mamey, Ahora sí voy a gozar, etcétera. A pesar de lo bueno que fue el primer álbum, este segundo parece haber alcanzado un mayor nivel de creatividad e inspiración. ¿Podría hablarnos un poco acerca de este período? ¿Cómo respondió el grupo a la primera ola de popularidad?

Si, claro, porque ya la orquesta se había consolidado y la orquesta gozó de una popularidad inmensa en nuestro país. Respondimos a la popularidad haciendo más temas, haciendo más fiestas, y todo el público lo aceptaba con un agradecimiento terrible, con una cosa muy buena. También empezando, que es lo que yo le digo a la gente de ahora, ahora la música nuestra ha degenerado en una cosa monogenérica, monotemática, y nada más que la puede bailar la juventud, dos viejos, nosotros los viejos no podemos bailar esa música, no tenemos la fortaleza que hace falta para bailar esa música… Y esa música que hicimos nosotros a pesar de que fue agresiva en el aspecto rítmico, la bailaba la juventud, los viejos, los niños, todo el mundo la bailaba. Pero ahora no, ahora la música es muy agresiva y muy fuerte y entonces eso si no… yo no pudo bailarla, no puedo bailarla, tengo que tener un entrenamiento para eso.

Y esa popularidad inspiraba a ustedes los músicos?

Claro que si… La popularidad es un arma de doble filo porque te compromete y tienes que estar encima de ella porque cualquier cosa que tú hagas mal enseguida vas para abajo. Nosotros nos esforzamos por mantener esa calidad, esa calidad, tan es así que cuando la Ritmo Oriental ya fenece en los años noventa (1990s) es cuando ya irrumpen la nueva… porque bueno todo es así, todo es cambiante, la nueva situación esta de la metalería, la Charanga Habanera, esto, lo otro, los Van Van, Paulito y eso, con una nueva visión y una nueva versión de lo que era la música cubana que ellos llaman timba. Porque la timba nosotros la llamábamos antes… pero no, ahora llaman timba, y ya es una nueva visión eso y nosotros éramos una charanga. Y en la época de nosotros, nosotros competíamos con cualquiera porque como decíamos nosotros era al pelo, ahora no, ahora las actividades son para 10 000, 20 000 gente en el medio de la calle, hacen falta una serie de equipos de audio para que se oiga bien, tienes que tocar muy fuerte…Y ya, entonces bueno, se dio al traste.

Nosotros pensamos que sin la Ritmo Oriental, eso que se llama la timba hoy en día no existiría.

No, no existiría, pero eso es una cosa que es dialéctica, eso es la ley. Para que existiera la Ritmo Oriental tuvo que existir una Aragón, y para que existiera la Aragón tuvo que existir un Arcaño, y para que existiera un Arcaño tuvo que existir un Antonio María Romeo y así, porque si no nada es cambiante. Mañana surgirán otras cosas.

Pero en ese sentido de cambiar y buscar nuevas fronteras yo creo que en su tiempo nadie alcanzaba a la Ritmo Oriental, era una orquesta muy agresiva.

No, claro que no. Mira, independientemente de cualquier situación fue una orquesta que nosotros tuvimos una gran experiencia porque nosotros empezamos, y empezamos, y estuvimos trabajando por un espacio de seis, siete u ocho años en el cabaret Tropicana haciendo los bailables. Eso ya nos dio una experiencia. También cuando empezamos en la orquesta éramos músicos casi empíricos, músicos que habíamos estudiado algo en la calle, y entonces después se hicieron las escuelas de superación, recuerdas? Y entonces la gente, tan es así que la gente, el timbalero de nosotros se graduó de batería, de drumista. La mayoría de todos los músicos fuimos para la escuela y aunque en ese momento nuestra escuela no daba título, todo el mundo alcanzó allí su maestría en solfeo, inclusive tuvimos un flautista que hoy en día está con el Buena Vista y está con la Charanga de Oro, Policarpo Tamayo, muy buen flautista. Y la orquesta de verdad que tenía unos niveles técnicos muy buenos. Entonces eso lo comprometía más a uno y cada vez que hacías algo… porque acuérdate que el Cha Cha Cha fue un ritmo que conmovió al mundo, fue un ritmo que le dio la vuelta al mundo pero… eran las voces unísonas, era una cosa… que ahí es don de están los secretos de la música y los misterios de la música, que por ser tan sencilla fue muy buena. Entonces nosotros, como músicos jóvenes en esos momentos, como los de ahora, estábamos en pos de una nueva creación, buscando nuevos horizontes, y entonces surgimos. Nosotros fuimos los primeros que hicimos aquellos bloques con efecto, empezamos a hacer arreglos por cuartas, empezamos a hacer orquestaciones, empezamos a hacer combinaciones de voces, y así hasta llegar a nuestros días.